Javier Mínguez. Memorias de un director ciclista.

Por Tony Socias Abr9,2023
avier Mínguez. Memorias de un Director ciclista.Javier Mínguez. Memorias de un Director ciclista. (Fuente imagen: dewierlesite.net)

Hoy presentamos a Javier Mínguez Bellosta, el Sabio de Valdearcos de la Vega.

Javier Mínguez es hoy a sus 73 años un referente en el ciclismo por toda una vida dedicada a ello en diferentes facetas. Con 24 años, en 1973 debuta como ciclista profesional en este deporte en el equipo Monteverde. Desde entonces ha ejercido como director deportivo a nivel nacional e internacional, siéndolo de la Selección nacional en ruta, desde 2013 a 2018. En su primer año como tal, se consiguieron las medallas de plata y de bronce, con Joaquim Rodríguez y Alejandro Valverde, respectivamente. En el siguiente año 2014, la de bronce, repitiendo metal Alejandro Valverde. En 2016 oro con Jonathan Catroviejo CRI en el Europeo. Aunque su mayor éxito deportivo y despedida de la Selección, qué paradoja, se logra en 2018 al conseguir el oro el ciclista murciano Alejandro Valverde en el Campeonato del Mundo en ruta en Innsbruck.

Además de la selección ha dirigido seis equipos en dieciocho años.

Tirando de hemeroteca encontramos frases que le definen:

El Tour es un miura que cada día embiste y cornea sin piedad. No se salva ni el líder.

Mi pasión es estar al lado de los ciclistas, por eso no me retiré, o:

Llevo el veneno del ciclismo en mis venas.

Aficionado al fútbol y por supuesto al ciclismo, asegura ser director de ciclismo, no entrenador, ni preparador.

Un referente sin duda para sus contemporáneos y por supuesto, para las nuevas generaciones que puedan ver en el Sabio, a un maestro vivo y dedicado en cuerpo y alma al noble deporte de las dos ruedas. ¿Qué más se puede pedir? Me siento verdaderamente afortunado de presentar a una persona como Javier Mínguez Bellosta.

José Carlos Arias Quevedo.

_____

Si analizamos los rasgos caracteriales de Javier Mínguez, se trata de un hombre curtido por la experiencia.

Claro en sus ideas y conceptos: al pan, pan y al vino, vino. Ambicioso pero generoso a partes iguales. Javier Mínguez es una persona sencilla con un tesón y energía arrolladores. Ha sabido, como director deportivo y a lo largo de su carrera, extraer las mejores prestaciones de sus corredores y como seleccionador, pone broche de oro a su carrera. Hoy en día te diría que como asesor es lo más parecido al Oráculo de Delfos y para los más jóvenes, un tesoro de valores, historia de éxitos y también de humanidades.

Ralph Murphy.

_________

Tony Socias. Te saludo con mucho gusto, Javier y agradezco de antemano, con toda sinceridad, tu excelente predisposición desde el principio con este Equipo. Es un verdadero honor

¡Vamos con esta entrevista!

VAT- ¿Contribuye la dulcificación progresiva que ha experimentado la exigencia del currículum oficial desde la Educación Primaria hasta el acceso a la Universidad en una relajación por parte de los más jóvenes en el desarrollo de la ambición y del espíritu competitivo?

JM- Pienso que la sociedad es competitiva por naturaleza.

El espíritu de competición jamás se va a perder. Evidentemente los tiempos cambian y quizás a lo mejor hay muchas oportunidades en la vida a partir del deporte, de la cultura a través de internet que hay muchísimo contacto. Todo el mundo tiene una buena información. Pero la competición son genes personales de cada uno y la sociedad es competitiva. Tienes que competir para tener una buena posición, una buena preparación, un buen trabajo, un buen futuro…La palabra examen como competición existirán toda la vida. Los tiempos cambian y hay que adaptarse pero la competición siempre existirá.

Es cierto que en las escuelas hay una base de preparación para los jóvenes de cara el futuro.

Sin escuelas no hay campeones tampoco. Necesitamos una escuela, una cultura. Los jóvenes tienen muchísimas cosas donde fijarse, pero aquel que se fije en el deporte, cuando se implica en ello, sabe que es exigente, es competitivo, que requiere un esfuerzo tremendo y que cuando uno lo hace porque le gusta no le cuesta trabajo. Es difícil que salgan campeones, entendemos a nivel mundial. También es difícil ser una estrella mundial en cualquier deporte o trabajo, pero quizá sin las escuelas no llegamos a ningún sitio. Tiene que haber una buena escuela, una buena cultura, una buena disposición y luego los talentos. Los talentos especiales salen, pero hay que cultivarlos, evidentemente. Pero si no tienes una buena base, una buena escuela y cimientos, todo puede terminar enseguida. Creo que hay que tener mucha constancia en la vida, tanto en el deporte como en otras facetas, porque la constancia es el premio al esfuerzo que vas a recibir después.

VAT- Si tuviésemos que hacer un balance de experiencia y tiempo, ante la tentación de volver atrás y arreglar algo: ¿Diríamos que sí o por el contrario, dejamos que la experiencia obre hacia el futuro de forma proactiva?

JM-Pienso sinceramente que volver hacia atrás no soluciona el problema.

Creo que hay que tener la perspectiva hacia delante. Todo cambia en la vida. Cualquier tiempo pasado fue mejor. Quizás a lo mejor añoras algo que tenías y qué no tienes, pero la vida pasa y no has notado que has vivido hasta que la vida ha pasado deprisa, con lo cual, has de tener un recuerdo del pasado, pensar en el futuro. Por ti en principio, por la gente joven que viene hacia delante. Recordar con cariño el pasado pero no volver hacia atrás, nunca, jamás. Hay que pensar hacia delante, en la modernidad, en ver cosas nuevas. Hace tiempo nadie podía pensar lo que serían en el futuro ciertas cosas y hoy en día en un segundo estás conectado con la otra parte del mundo. Viéndote, saludándote. Quedarte con lo bueno del pasado sin olvidarlo y abiertos a lo que bueno que está por venir.

VAT: ¿Cuáles han sido los peores momentos de tu carrera?

JM- En la vida de todas las personas hay momentos buenos y momentos malos. Cierto es que los malos son muy malos y que los buenos son muy buenos. En mi vida deportiva he tenido momentos muy duros y muy crueles.

Han sido la muerte de Alberto Fernández y su mujer en un accidente de tráfico. Otro corredor que le mató un camión, había firmado conmigo y no llegó a correr que fue Blas Domingo Llidó y la muerte de Antonio Martín. Esas cosas te marcan para toda la vida. Tengo el recuerdo permanente de momentos cruciales de la vida y son los peores momentos que he vivido en mi vida sin dudarlo. Eso no tiene precio.

VAT- ¿Y los mejores?

JM- En un orden no puedes, porque siempre te queda el último recuerdo y te olvidas del primero, ¿no?

Pero en un orden cronológico de situaciones el primer gran momento fue la victoria de Faustino Rupérez en la Vuelta a España de 1980. Luego, el triunfo de Álvaro Pino, también en la Vuelta a España. Momentos inolvidables en la etapa de Alpe d’Huez, que hicimos primeros con Fede Echave y segundos con Anselmo Fuerte. El mundial con Óscar Freire, por supuesto y luego, el recuerdo permanente que tengo es el mundial de Valverde. Claro, entre todo esto son los momentos que he vivido, pero también tuve la gran suerte de formar parte en el año 1994 y 1995 de los éxitos de Miguel Induráin en el Tour de Francia en el equipo Banesto y vivir por dentro quién es Miguel Induráin te marca para toda la vida, porque tú ves a Miguel desde fuera y crees que es Supermán, le ves por dentro y sabes que es humano. Tiene dolores y sufrimiento y alegrías como todo el mundo. Estar dentro con él y tener la satisfacción de tener su amistad hoy no tiene precio. Son momentos inolvidables de mi vivencia en el mundo del ciclismo.

VAT- Has convivido en tu vida profesional con muchos periodistas deportivos. Como en todo, los hay que contribuyen a engrandecer este deporte y otros que no ayudan. Mirando en positivo, vamos a los que suman…

JM-la verdad es que cuando empecé de director, prácticamente el periodismo deportivo estaba representado por Marca, As y poco más.

Y luego empezó televisión después. En aquellos entonces, Marca era Carrasco, un señor mayor ya y Simón Rufo de As. Después de Carrasco en Marca vino José Manuel Egido, que llegó a ser incluso Manager de SEUR. Con lo cual mi trato con ambos periódicos era bueno, con Egido también. Luego vino una épica muy fuerte igualmente en la que el que apoyaba el ciclismo era José María García. Siempre hemos tenido una muy buena relación y a nivel de radio con Javier Ares por cercanía y evidentemente porque es paisano y amigo de Valladolid. Luego había otra época en la que estaba presente la prensa del Norte donde había mucha afición, muchísimo ciclismo. Estaba Benito Urraburu, del Diario Vasco, Josu Garai es de Bilbao pero estaba de jefe de redacción en Marca, siempre hemos tenido una muy buena relación. José Uriarte, también estaba de Deia. Muy buena gente.

Siempre he tenido muy buena relación con la prensa.

Evidentemente, nunca estás de acuerdo con lo que te van a decir siempre porque es lógico y normal, pero puedo presumir de haber tenido una muy buena relación con la prensa. Las excepciones no cuentan. Y luego ya viene una segunda época final en Televisión, que estaba en principio Pedro González muy buena gente, muy buen amigo de los corredores y de todo el mundo. Después vino otra época en la que están Pedro Delgado y Carlos de Andrés pero ya tenía menos relación con ellos, porque del año 2000 al 2013 estuve sin dirigir. Cuando volví a la Selección ya había otro tipo de periodistas. Josu Garai de Marca lo dejaba, igual que Benito Urraburu, luego prensa nueva, con la que tengo muy buena relación. Incluso después del Mundial, Ainara, de Vitoria, una periodista que trabaja en Ciclismo a Fondo y hacía colaboraciones con la radio. No la pagaban mucho, evidentemente, pero hizo el libro del Mundial cuando fuimos los mejores. No he tenido grandes dificultades con la prensa. La verdad es que he tenido una buena relación. Quizá a lo mejor porque no era difícil entrevistarme a mí.

Digamos que siempre he estado dispuesto a hablar hasta con Radio Taxi porque entiendo que formo parte de un producto que es el ciclismo y por él, tengo que colaborar.

Eso lo tenemos que entender. Hay veces que te gusta y veces que no te gusta. Entonces no puedes estar siempre a que te hagan una foto y te pongan bonito, sino que estás expuesto y por ese hecho te toca de todo. Lo tienes que entender. No es un juego, es una realidad de trabajo.

VAT-Aproximadamente, a mitad de carrera, uno empieza a darse cuenta de principios que funcionan casi siempre y llegas a establecerlos como reglas de vida.

¿Cuáles son?

JM- Está claro que en la vida hay prioridades y hay situaciones, pero cuando te dedicas a nivel profesional y en el deporte es un examen día a día y público, tienes que partir de unos cimientos y la verdad que la seriedad es el punto número uno y la disciplina.

En el caso del director, debes tener la personalidad como defensa ante los corredores en la carrera, ante la prensa y ante el jefe. Tienes que marcar una personalidad definida y estar pendiente de este tipo de situaciones que son complicadas en algunos momentos y muy eufóricas, muy de abrazos y de besos en otras ocasiones. Con lo cual debes tener seriedad, lo primero, disciplina, evidentemente y una personalidad marcada para que las cosas vayan siempre al compás de los acontecimientos y no te arrollen. Creo que es la mejor situación.

VAT-Nos situamos en el año 1994 en que desaparece el equipo Amaya y la estructura se integra en el equipo Banesto. Venías con Mikel Zarrabeitia y Jesús Montoya y encuentras un equipo prácticamente hecho pero de corredores a los que habías conocido incluso a los que habías ayudado en cierto modo a madurar, porque los lances de carrera llevan a ciertas colaboraciones.

¿Cómo describirías esa experiencia de integración?

JM- Para mí el año 94 representó algo muy diferente. Estaba acostumbrado desde que empecé como director a hacerlo todo yo y fui a un sitio que estaba todo hecho, todo el marcha y en el que había un líder que era Don Miguel Induráin, en todos los aspectos y un hombre que estaba en su recta final, que era Pedro Delgado.

No hubo ninguna complicación, ningún tipo de problema. Todo fue normal. Yo estaba en un segundo plano pero la convivencia fue genial, tanto el 94, como en el 95 que se terminó y es una experiencia diferente. Te dabas cuenta a lo mejor de que en los sitios donde iba Induráin, todo el mundo se estaba preguntando y pendiente. Movía toda la masa del ciclismo mundial y en aquellos momentos era un líder indiscutible, tanto en el 94 como en el 95, que fueron los últimos Tours que ganó. Creo sinceramente que fue una muy bonita experiencia, un muy bonito recuerdo que tengo presente. Tengo permanentemente una amistad personal con Induráin, algo que es una grandísima satisfacción.

VAT- A lo largo de tu carrera como director has trabajado con muchos corredores. ¿Habría manera de hacer una lista de corredores con atributos especiales que quisieras mencionar sin por ello desmerecer a otros?

JM-Pues la verdad es que a lo largo de mi carrera he tenido a infinidad de corredores a mis órdenes. De todos guardas un gran recuerdo y cada uno tenía su personalidad.

Por ejemplo, en la época en la que empecé.

Faustino Rupérez.

Era todo responsabilidad, seriedad y disciplina.

Alberto Fernández.

También era un hombre que en esas mismas condiciones cuando llegó con nosotros tenía también ese estandarte la disciplina, la seriedad, el entrenamiento, la alegría y el sufrimiento y era algo que contagiaba al equipo.

Eran líderes que contagiaban el espíritu de sacrificio a todo el equipo. Siempre ha habido corredores sorpresa que han llegado siendo nada o habiendo estado oscuros, como:

Javier Montoya.

Fue una revelación que casi gana una Vuelta a España e hizo cosas muy buenas en el ciclismo. Son sorpresas que te vienen. Luego hay corredores como:

Javier Murguialday

Llegó a ganar una etapa en el Tour de Francia.

Oliverio Rincón.

También ganó una etapa en el Tour de Francia. Colombiano, escalador, con una calidad tremenda, con poca fe en sí mismo, pero insisto, con mucha calidad.

Fabio Parra.

Era capital de sufrimiento, porque sufría hasta la extenuación. No estuvo en sus mejores años conmigo, pero sí que llegó a darnos muy buenas alegrías.

Luego tuvimos al grandísimo Álvaro Pino.

Fue algo contagiado de aquella época de los Alberto Fernández y Faustino Rupérez. Él se miraba en el espejo de los que sufrían y trabajaban y batallaban.

Y ha habido corredores de todo tipo como me acuerdo de un Eduardo Chozas joven.

Con mucha visión para las escapadas y un gran rendimiento en las largas fugas.

Laudelino Cubino.

Con una clase espectacular, tremenda. Le llamaba el Curro Romero del ciclismo porque era capaz de lo mejor y de lo peor, pero le faltaba confianza en sí mismo.

Luego una racha de jóvenes como Zarrabeitia que fue un buen corredor.

Antonio Martín.

Desaparecido por accidente. Fue algo mortal. Era quizá un corredor llamado a ser sucesor en todo momento de Miguel Induráin. No digo de las historias, sino del poderío, porque sus pruebas médicas y físicas así lo decían. Tenía cabeza, tronco y extremidades. Sumaba en todos los terrenos. No tenía ningún punto débil y es algo que nos marcó. Quizá es el corredor con mayores condiciones físicas que particularmente he tenido.

Después tuve trato con Chaba Jiménez.

Era un artista, un escalador de los que hoy gano y punto. Ser olvidaba a lo mejor de la disciplina y de la contrarreloj y de otras cosas, pero era un artista capaz de ganar a cualquiera en la montaña.

He convivido también con Alejandro Valverde y con la Selección con Purito Rodríguez.

Eran dos corredores similares, cada uno en lo suyo, pero con un palmarés riquísimo los dos. Creo que a Valverde no le falta nada y a Purito tampoco, pero le falta una grande, que no y sin embargo tiene pódium en las tres grandes, cosa que Valverde también, cosa que muchos corredores no van a tener jamás. Experiencias que han sido gloriosas.

También tuve infinidad de corredores que dieron alegrías como Fede Echave.

Vino siendo un esprínter y a base de hablar con él y decirle quizás, a lo mejor, con la fuerza que tenía podía llegar a estar con los mejores en la montaña…y ganó una etapa en el Tour de Francia, ni más ni menos que en Alpe d’Huez en 1987 y segundo Anselmo Fuerte, otro corredor con mucha calidad subiendo. He vivido la suerte de estar con todos estos corredores. No me puedo quejar. Igual he tenido demasiada suerte de poder convivir con ellos y conocerlos por dentro.

He conocido también menos y a última hora a ciertos corredores que venían a la Selección, como vino una vez Contador y te das cuenta de la capacidad del poder de concentración y de capacidad de ganador que tiene y también de Samuel Sánchez.

Pero quizás también tuve la suerte de pasar unos jóvenes corredores al equipo Vitalicio Seguros en el año 98 y de esos jóvenes salir un Óscar Freire que fue tres veces campeón del mundo. Mercado, Horrillo…

Creo que he tenido demasiada suerte en esa rueda de jóvenes que pasaron. No es fácil repetirlo, pero haber tenido la suerte de haber tenido a ese elenco de grandes corredores contigo, pues soy un afortunado y tengo que dar las gracias a toda aquella gente que ha trabajado en las categorías superiores, en las inferiores, en los clubs de ciclismo y las escuelas para formar chavales y luego les he disfrutado, así que desde aquí, gracias. También han sabido mal las grandes pérdidas como ya he mencionado, lo más drama y de las caídas, que te dejan preocupado. Es un deporte de mucho riesgo. Demasiadas pocas cosas pasan en el ciclismo, por las que podrían ser.

____________________________

Derechos de imagen.

La imagen que encabeza esta entrada, ha sido autorizada por el entrevistado Don Javier Mínguez Bellosta. La fuente legítima de procedencia es la página web derwieseliste.net

About Post Author

By Tony Socias

¡Os doy la más sincera bienvenida al Magazine viviraltiempo.com! Como fundador y en representación de este Equipo interdisciplinar de Asesores tengo el gusto de anticiparos que entramos en una fase audiovisual definitiva con interesantes contenidos, programas y zonas de e-commerce de alta calidad. ¡Suscríbete a viviraltiempo.com y recibe al instante vía e-mail todas nuestras publicaciones!

Related Post

Un comentario sobre «Javier Mínguez. Memorias de un director ciclista.»
  1. Javier Minguez, un Director de ciclistas y de equipo ciclista MUY PROFESIONAL y muy inteligente en carrera y en planteamientos de carrera. Una pena que sólo encontrara patrocinios para montar equipos de nivel medio; pero lo que montó en el equipo BH con Pino, Cubino, Fede Etxabe y Anselmo era un equipo de mucho nivel. El único lunar, el fichaje de Santi Blanco; que fue un bluff de mucho cuidado. En definitiva, un gran Director de ciclistas y una persona con mucho carácter, pero siempre con las ideas MUY claras.

Deja un comentario

Este sitio web utiliza cookies para que usted tenga la mejor experiencia de usuario. Si continúa navegando está dando su consentimiento para la aceptación de las mencionadas cookies y la aceptación de nuestra política de cookies, pinche el enlace para mayor información.plugin cookies

ACEPTAR
Aviso de cookies

Descubre más desde viviraltiempo.com ®

Suscríbete ahora para seguir leyendo y obtener acceso al archivo completo.

Seguir leyendo

Descubre más desde viviraltiempo.com ®

Suscríbete ahora para seguir leyendo y obtener acceso al archivo completo.

Seguir leyendo